viernes, 26 de abril de 2013

I Jornada Ambiental Proyecto EVA

Miércoles, 24 de abril de 2013
SOCIEDAD

Una fertilización alternativa es posible gracias a un tipo de bacteria

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Redacción/la Voz de Tenerife
Desde el departamento de Microbiología y Biología Celular de la Universidad de La Laguna se investigan las posibles aplicaciones de microorganismos a la mejora de las técnicas de agricultura ecológica y la protección del medio ambiente.
[Img #29282]La investigación actual se centra en la acción de los rizobios, bacterias con capacidad para reducir el nitrógeno atmosférico y que sea asimilado por las plantas, en concreto, por leguminosas (lentejas, garbanzos, soja…). 

Los rizobios, de forma opuesta a la creencia popular de que todas las bacterias son patógenas, participan en el óptimo desarrollo de las leguminosas  acoplándose a sus raíces. Se trata de una relación simbiótica donde la planta obtiene un mayor aporte de nutrientes y se hace más independiente en lo que a la necesidad de nitrógeno se refiere. Por su lado el rizobio obtiene protección por parte de la planta y recibe el carbono para completar el proceso de reducción del nitrógeno a amonio. Además, los rizobios muestran una mayor productividad cuando viven asociados a una leguminosa que cuando llevan una vida libre. 

El aporte extra de nitrógeno hace posible la utilización de productos elaborados con rizobios como biofertilizantes. La necesidad de amonio (nitrógeno reducido) que tienen las leguminosas para su óptimo crecimiento ha sido paliado tradicionalmente con la adhesión de fertilizantes artificiales con un alto nivel de toxicidad, tanto para el medio ambiente como para las personas. El coste ambiental es elevadísimo ya que se abusa del uso de nitratos contaminantes que acidifican el suelo y contribuyen al efecto invernadero. 

Sumado a ello hay que tener en cuenta el impacto sobre la salud humana, ya que por lixiviación los componentes tóxicos integrados en los fertilizantes artificiales pasan a los acueductos y galerías de agua, derivando en la contaminación de las aguas de uso doméstico y un aumento del riesgo de padecer cáncer. 

Una transformación en las técnicas de cultivo conduciría a una mejora en la salud de la población canaria y del entono natural. Pero además, acarrea un ahorro económico. Los agricultores evitarían gastar grandes cantidades de dinero en la adquisición de productos fitosanitarios para aumentar el nivel de nitrógeno del suelo donde crecen las leguminosas. 

El equipo formado por Ricardo Pérez Galdona, Milagros León Barrios, Juan Ernesto Pérez Yépez, Natalia Armas Capote y Paola DortaRosano busca ahora nuevas funciones para las bacterias fijadoras de nitrógeno, da tal forma que también aporten a las plantas, en esta relación simbiótica, fosfatos, fitohormonas, etc… En general, mejorar el desarrollo de las leguminosas, especies vegetales de gran interés para la alimentación humana.

Recuperación de biodiversidad: 

La puesta en práctica de nuevas técnicas para cultivar en Canarias, evitando las sustancias tóxicas que esquilman el medio ambiente, también trae consigo una mejora en la protección de la biodiversidad. En los pequeños cultivares locales se cultivan variedades genéticas de leguminosas que están en peligro de extinción o que son únicas en el mundo. Mediante la aplicación de tratamientos no abusivos se puede conseguir su recuperación y dar un valor añadido a la agricultura canaria. 

Un ejemplo lo constituye el tagasaste, una especie endémica de las Islas Canarias que se cultiva es Australia y cuya calidad es excepcional como alimento para el ganado. Asociando los rizobios a las raíces de las leguminosas se consigue recuperar la especie sin repercutir de forma negativa en el ambiente y en la salud canaria. 

Esta información será expuesta de primera mano este viernes 26 de abril en la celebración de la I Jornada Ambiental Proyecto EVA en el Instituto de Productos Naturales y Agrobiología (IPNA), donde se darán cita expertos de todos los ámbitos del sector primario con el fin de difundir su labor investigadora y las acciones que pueden potenciar agricultura, ganadería, pesca y todo tipo de actividades relacionadas con el medio ambiente. 

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